domingo, 28 de octubre de 2012

Conclusión



El prerrenacimiento es una época en la cual se mezclan temas de tradición y renovación literaria, factor que enriquece la literatura de estos siglos.
Consta de:
  • Los cancioneros dentro de la poesía culta, los cuales tratan de temas variados.
  • Los romanceros, fueron un buen avance ya que de esta manera han quedado recogidos todos los romances de un intervalo de 3 siglos en la actualidad.
  • Tuvo una prosa muy desarrollada tratando desde temas de novelas de caballería, novelas sentimentales hasta sátiras de costumbres.
  • El teatro no estuvo tan desarrollado todo y que destacaron grandes autores como Lucas Fernández.
Entre muchos autores y obras, los mas característicos de este período son Jorge Manrique con su gran obra de Las coplas a la muerte de su padre, y Fernando de Rojas con La Celestina.

Respecto a la confección del blog no ha estado cosa fácil, puesto que ninguno sabiamos muy bien como funciona, hemos tenido que investigar detalladamente que era cada cosa y que función podían tener.

En general ha sido un trabajo agradable, el tema nos ha gustado mucho ya que era muy variado y no lo habíamos trabajado anteriormente. Ha supuesto mucho esfuerzo y dedicación pero ha valido la pena.

Cuestionario



1. ¿De qué estilo es la poesía culta del siglo XV?


2. ¿Por qué se valora a Jorge Manrique como el mejor poeta de su siglo?


3. ¿Cómo se llamaban las colecciones de romances que se confeccionaban en los siglos XVI y XVII?


4. ¿Qué estilo presenta el romance?


5. ¿Qué modelos de la época sigue el desarrollo de la prosa castellana?


6. ¿Qué género es el que menos se desarrolla en el siglo XV?


7. ¿En qué año se publicó una edición ampliada de la Celestina?


8. ¿Qué tres temas combina la Celestina?


9. ¿En qué se clasifican los romances según los temas que tratan?


10. ¿Qué son las coplas de pie quebrado?

La celestina de Fernando de Rojas



El siglo XV se cierra con la aparición de una de las obras más importantes de nuestra literatura: La Celestina. Es una época en que el humanismo ya está en plena vigencia, lo cual también influye en la obra de Fernando de Rojas. Se muestra la sensibilidad moderna desde un punto de vista pesimista.

Fernando de Rojas fue hombre de leyes, vivió en diferentes ciudades durante el siglo XV. Era un escritor universitario, urbano y moderno, que escribió la ‘Celestina’ expresando un gran pesimismo y desorientación social y moral.

La Celestina fue escrita con una clara intención, que era concienciar y prevenir a los jóvenes y locos amantes de los peligros del amor y de las alcahuetas. Aunque también son protagonistas de la obra intenciones no moralizadoras como el pesimismo, la soledad y el sentido trágico de la vida, o algunas escenas que desbordan sensualidad y/o el individualismo de las personas.

Según sus declaraciones, encontró el primer acto de ésta gran obra y la acabó de escribir en unos quince días.

Ésta obra tiene un estilo muy variado, cada personaje habla como le corresponde dentro de su clase social, la clase alta usa el lenguaje culto y la clase baja como los criados o las prostitutas usan el lenguaje coloquial. Así, se puede apreciar la diferencia los personajes sociales de una manera realista.

La obra cuenta la historia de Calisto, que se enamora de Melibea y pide ayuda a una prostituta, ahora casamentera, que le ayude para conquistarla. A partir de aquí, la historia se llena de amor, traición, pasión y hasta asesinato.

El principal problema del estudio de La Celestina es la cantidad y variedad de ediciones que se conservan de la obra. El primer libro apareció en 1499 y no constaba el nombre del autor. En 1502 se publicó una edición ampliada con un prólogo de Fernando de Rojas que dice que lo escribió para advertir a los locos enamorados de los peligros del amor. También salen unos versos acrósticos, a través de las iniciales se lee que“Fernando de Rojas es el autor de La Celestina”.

  • El género literario. La Celestina es una comedia humanística italiana y dialogada que, a su vez, imitaba a los clásicos latinos Plauto y Terencio. Estaba escrito en latín y era para ser leído, no representado. Combina rasgos del teatro (por la forma dialogada) y de la novela (por el tono sentimental y psicológico, y los frecuentes cambios de escenario).
  • El argumento. Calisto, un joven noble y apuesto ve casualmente a Melibea, de quien queda profundamente enamorado. Ante el rechazo de ésta y aconsejado por su criado Sempronio, decide encomendar su cuidado a Celestina, para lograr por medio de ella el amor de Melibea. La alcahueta consigue mediante artimañas que Melibea se enamore de Calisto y que proponga una cita.
El joven feliz le regala una cadena de oro a Celestina y cuando los criados se enteran le reclaman la parte de la recompensa y ella se niega y muere en la disputa.

Detienen a los criados y Calisto sin enterarse de nada los sustituye por otros.

Cuando los amantes están en el jardín de Melibea, Calisto oye unos gritos y al intentar saltar un muro para acudir en ayuda a sus criados, cae y muere.

Melibea le dice a su padre que su vida no tiene sentido sin Calisto y se suicida desde una torre y su padre cierra la obra manifestando su dolor.

  • Los personajes. Son realistas, evolucionan a lo largo de la obra. Todos arrastrados por sus pasiones, Calisto y Melibea por el amor producido en parte por la avaricia de Celestina y de los criados. Son personajes que no responden a los modelos literarios anteriores, un rasgo renacentista, personajes individualistas y una visión pagana y trágica ya que no se sienten culpables.
  • El tema. Combina los tres temas principales: fortuna, amor y muerte. La fortuna, el azar y la fuerza de la pasión amorosa mueven a Calisto y Melibea, la codicia mueve a Celestina y a los criados, y todos van hacia la muerte víctimas de un destino incomprensible.
  • Intención de la Celestina. Fernando de Rojas dijo que había escrito la obra para prevenir a los locos enamorados y avisar de los engaños de las alcahuetas y de los malos sirvientes. Intención moralizadora, como en la literatura medieval ya que presenta la muerte de los personajes como un castigo divino por la rebelión de las normas morales de la época. También hay influencia renacentista como el individualismo, la tragedia de la vida. La visión pagana del mundo, la sensualidad, etc. Resumido en el monólogo del padre de Melibea al cerrar el libro.
  • El estilo es el más variado de la época, los personajes hablan desde una perspectiva realista. Como el lenguaje formal entre Calisto, Melibea y su padre o el lenguaje coloquial entre los criados y Calisto. Melibea es el personaje que se mueve entre estos dos ambiente.
Imagenes de la Celestina

El teatro en el siglo XV



La actividad teatral se halla vinculada en este momento a los lugares en los que se desarrollan las diversiones populares o las celebraciones religiosas (como el Corpus o la Navidad). A final de siglo, el teatro se introduce también en los palacios, donde se realizan los festejos cortesanos.

Durante esta época destacan fundamentalmente en el teatro religioso Gómez Manrique y Lucas Fernández, y en el teatro renacentista, Juan del Encina, quien refleja la influencia humanista en obras como Égloga de Plácida y Victoriano, donde combina el tono sentimental y los personajes mitológicos. Y además de motivos religiosos, desarrolla una temática profana. Su obra, como la de Lucas Fernández, se sitúa entre la tradición medieval y la del Renacimiento. Pero, sin duda, la obra dramática más importante de esta época es La Celestina, de Fernando de Rojas.

                                          La celestina                       Fernando de Rojas

La Prosa en el Siglo XV



La prosa castellana del siglo XV se desarrolla siguiendo los modelos de la época o tendencias principales: lanovela idealista o prosa de ficcióny la sátira de costumbres o prosa didáctica.

Novela idealista o prosa de ficción

Es aquella que presenta una realidad estilizada o embellecida y que, por ello, se aleja del realismo. Se centra en el tema amoroso y se caracteriza por la presentación de abundantes elementos fantásticos e inverosímiles. Constituye un antecedente de la novela moderna. Presenta dos manifestaciones fundamentales: las novelas sentimentales y las novelas de caballerías.


  • La novela de caballerías narra las aventuras de un caballero andante con el heroísmo de proteger a los indefensos, perseguir la injusticia y el amor a una dama, que le hacen triunfar sobre cualquier obstáculo.La novela de caballerías más valorada fue Amadís de Gaula , relato que más tarde, en el siglo XVI, reelaboró Garci Rodríguez de Montalvo con gran éxito y dio lugar a toda una saga de Amadises, y por otro lado Tirant lo Blanc, escrito en catalán por el valenciano Joanot Martorell. Esta obra se distingue de otros libros de tema caballeresco por su rechazo de los temas fantásticos y por el empleo de la ironía.
                                    Amadís de Gaula                     Tirant lo Blanc



  • La novela sentimental responde a los nuevos gustos e ideales de la burguesía relatando historias de amor cortés que se centran en el análisis de las emociones de sus protagonistas como la imposibilidad del amor planteado (por el rechazo de la dama o por cuestiones de honor) hace que sean frecuentes desenlaces funestos como el suicidio. También es habitual que el enamorado se comunique por carta con su amada mediante la ayuda de un intermediario.
Frente a la complejidad argumental de los libros de caballerías, las novelas sentimentales suelen presentar una trama más sencilla y una menor extensión.
Los autores más representativos de este género son Juan Rodríguez del Padrón, autor de Siervo libre de amor, y Diego de San Pedro, quien escribió Cárcel de amor, ambas obras triunfaron en esta corriente.

                                   Cárcel de amor                      Siervo libre de amor


La sátira de costumbres o prosa didáctica

Sigue fiel al objetivo medieval de educar y modificar comportamientos.

Los principales representantes de la prosa didáctica de este siglo son Enrique de Villena, el autor de Los doce trabajos de Hércules y Alfonso Martínez de Toledo, arcipreste de Talavera(1398-1468),autor de la obra más representativa, el Corbacho o reprobación del amor mundano(1438).
                        Los doce trabajos de Hércules                 El Corbacho


Esta obra es una sátira que trata del amor desde una perspectiva cristiana que incorpora muchos tópicos misóginos, es decir, prejuicios contra las mujeres, y rechaza los códigos del amor cortés a los que se sometían a la mujer, ya que consideraba que el amor mundano y la pasión desenfrenada van en contra de la voluntad divina y son origen de otros pecados.
La mujer se presenta como una causa de perdición espiritual para el hombre, que a menudo es retratado como una víctima de sus engaños. La obra, además, interesa porque se mezclan elementos cultos y populares, recoge el lenguaje vivo y desenfadado de la época: la lengua coloquial llena de refranes y de giros populares, que recuerda al la del Libro de Buen Amor y se asemeja a la de la Celestina.

Los romances y los romanceros



Cuando los juglares recitaban los cantares de gesta, la gente pedía que repitieran los fragmentos más interesantes. El pueblo los aprendió y al repetirlos exclusivamente de forma oral, fue cambiando su contenido. En el siglo XV desapareció el gusto por los cantares de gesta, pero se siguieron recordando algunas partes de ellos que se convirtieron en romances.

Los romances son poemas épicos o épico-líricos, casi siempre breves, compuestos originariamente para ser cantados o recitados al son de un instrumento. Su valoración va muy relacionada con lo tradicional, influenciada por el humanismo.

Están formados por un número indefinido de versos octosílabos con rima asonante en los pares, manteniendo casi siempre la misma rima durante toda la composición, mientras quedan libres los impares. Tienen un carácter fragmentario, ya que a veces son simples escenas o pequeñas historias, que parecen aisladas de contexto y nos da la sensación de no conocer principio ni se pueden clasificar, según su origen, en romances viejos y romances nuevos.

· Romances viejos: Los romances más antiguos son de finales del siglo XIV y principalmente del siglo XV.

Pertenecen a la literatura popular y tradicional, son de transmisión oral y anónimos. Se parecen a los cantares de gesta en el trato de los temas, se dice que los romances proceden de los cantares, debido a la similitud métrica y conservamos gran número de romances viejos porque se recopilaron en Romancerosa partir del siglo XV hasta finales del XVII.

Un romance Viejo
· Romances nuevos o artísticos: Son muy parecidos a los romances viejos. Amplían y renuevan el contenido temático y los recursos formales. Usa poco los recursos sus descripciones son muy realistas, sin elementos fantásticos o mágicos y escasez de adjetivos y metáforas. A pesar de ello se consigue una extraordinaria viveza narrativa y los más variados efectos poéticos.

Destaca la inmediata composición de la escena y la presentación de los personajes, la aproximación a la realidad con una gran fuerza plástica y el arte de saber llevar la atención del oyente hacia el núcleo temático.

Se combinan admirablemente la narración y el diálogo; mediante éste se consigue el característico movimiento dramático.

Muchos poetas cultos, como Cervantes, Lope de Vega, Góngora, Quevedo, componen también este tipo de romances.

Los temas de los romances son muy variados.

  • Romances épicos que recogen temas y personajes de los cantares como El Cid o Roldán.
  • Romances históricos, historias bíblicas y grecorromanas.
  • Romances novelescos de amor, misterio, venganza o aventuras.

Jorge Manrique. Las coplas de la muerte de su padre



En referencia a la fecha de nacimiento de Jorge Manrique, no se puede hablar con certeza, pues no se sabe del todo; se aproxima que nació sobre 1440 y falleció en 1479. Era miembro de una familia de la nobleza de Castilla (era hijo de don Rodrigo Manrique, maestre de la orden de Santiago, y sobrino del poeta Gómez Manrique), Jorge Manrique compaginó su afición por las letras con la carrera de las armas, participando junto a su padre en las luchas que se originaron después del ascenso de los Reyes Católicos. Ambos pertenecían a la orden de Santiago, y combatieron del lado de Isabel la Católica en varias batallas y siempre leal.En una de esas batallas, en Uclés, ante el castillo de Garcí Muñoz, fue herido mortalmente, y en ese mismo sitio le dieron sepultura.
A pesar que su vida fue corta, la vivió intensamente. Fue señor de Belmontejo, miembro de la Orden de Santiago.
Jorge Manrique


La poesía de Jorge Manrique se sitúa dentro de la corriente cancioneril del siglo XV. Su producción poética menor, reunida en un Cancionero, está formada por medio centenar de composiciones breves, en su mayor parte de tema amoroso, que siguieron los cánones trovadorescos y cortesanos de finales de la Edad Media. Más originales son sus piezas burlescas, como las "Coplas a una beoda" o la titulada "Convite que hizo a su madrastra".
Coplas a la muerte de su padre

Su gloria como poeta proviene de sus famosa Coplas a la muerte de su padre. Un poema que consta de cuarenta y tres coplas en “pie quebrado”, de las cuales una tercera parte está dedicada a su padre y el resto, la mayoría, a la muerte en su sentido universal, lo cual hace de este poema una obra universalmente reconocida.

Vamos a ver en profundidad esta obra:

· Tema. Las Coplas desarrollan el tema de la muerte: parten de una meditación genérica sobre la fugacidad de la vida y acaban presentando la muerte del padre del poeta.

El tema de la muerte fue muy frecuente en la edad media, desde la perspectiva cristiana, la muerte era vista como liberadora, sin embargo en los siglos XIV y XV era habitual presentar la muerte como un personaje terrorífico.

· Estructura. La composición consta de 40 estrofas de 12 versos: las coplas de pie quebrado formadas por una sextilla doble de versos de 8 y 4 sílabas llamada desde entonces manriqueña en honor al poeta. Su esquema métrico es 8a,8b,8c,8a,8b,4c; 8d,8e,4f,8d,8e,4f. Es una forma sencilla que obliga a una cierta concisión y Manrique mediante los acentos, consigue un ritmo muy marcado.

Los temas que trata en la obra se pueden dividir en 3 partes:

o Reflexión sobre la fugacidad de la vida y la certeza de la muerte. Recrea los temas clásicos, o tópicos, que se conocen con las expresiones latinas. Ambos motivos van ligados inevitablemente a la reflexión sobre la vanidad de las cosas terrenales, es decir, lo inconsciente y efímero de los bienes mundanos.

o Evocación, emotiva y nostálgica del pasado, ya desaparecido, que concreta con ejemplos las ideas generales anteriores. El retrato brillante y sensorial de la vida cortesana se intensifica porque se va recordando su fugacidad mediante las interrogaciones: ¿Qué fue de...? o ¿Qué se hizo de...?, fórmulas que representan el tópico literario ubi sunt? ‘¿Dónde están?’

o Individualización en torno a la figura del padre, Don Rodrigo, presentado como ejemplo por sus virtudes, sus hazañas, su resignación y su serenidad ante la llegada de la muerte. Al final, en un sosegado diálogo, la muerte consuela al caballero diciéndole que le esperan dos formas de vida:

La fama, que le permite vivir en la memoria de las generaciones futuras, y la vida entera y verdadera. A esas dos vidas contrapone la caducidad y lo engañoso de la vida terrenal.

· Estilo. El estilo de las coplas es sencillo, antirretórico, sobre todo si se compara con el modelo dominante de la época. La naturalidad del lenguaje contrasta con la gravedad del tema. Posiblemente, es la combinación de sencillez y profundidad es la que convierte a Manrique en un autor especialmente valorado por los poetas posteriores.

  • Sentido de las Coplas. La obra de Jorge Manrique recoge la sensibilidad del final de la edad media, mientras que la figura de su padre, el protagonista del poema, encarna las virtudes caballerescas y cristianas medievales. La obra refleja las contradicciones de la época cuando expresa la tensión entre la concepción cristiana medieval y una nueva sensibilidad, más respectiva a la belleza de la vida. Manrique muestra otros rasgos prerrenacentistas, como la valoración de la fama y la delicadeza y elegancia con la que trata el tema de la muerte.